Actualmente, el nivel del río en la ciudad de Santa Fe se ubica netamente en aguas bajas según lo clasificó el INA y se espera que se mantenga el descenso en las próximas dos semanas. “Estamos en aguas bajas y va a continuar así, muy probablemente durante lo que resta del invierno también”, sostuvo.
El último informe semanal del INA habla de que "sobre Santa Fe se observó una tendencia con gradual disminución de los valores semanales en la franja de aguas medias o bajas, (mayoritariamente en aguas bajas en Santa Fe).
Oscilaciones sobre el nivel del río Paraná
Respecto al impacto de las lluvias locales, Borus expresó: “Las precipitaciones en Entre Ríos o Santa Fe pueden provocar una recuperación momentánea, pero lo que realmente importa es que llueva sobre la cuenca alta en Brasil. Ahí es donde se define la tendencia general del río”.
El especialista también explicó que, ante niveles tan bajos, el río puede registrar oscilaciones bruscas de 10 o 15 centímetros de un día para otro. “Cuando los niveles están dentro del rango medio, los cambios son más graduales. Pero en bajante, cualquier pulso de agua se nota más”, detalló.
Sobre el papel de las represas en la cuenca alta, Borus señaló que su función principal es la generación de energía, por lo que no retienen agua deliberadamente. “Las presas atenúan las grandes crecidas y también las grandes bajantes, pero esa capacidad de regulación tiene límites, especialmente después de tantos años con lluvias deficitarias”, concluyó.